Okinawa, un grupo de islas en el sur de Japón, es una de las Blue Zones más famosas del mundo: lugares donde las personas viven vidas excepcionalmente largas y saludables. Una de las claves de su longevidad es un estilo de vida equilibrado, donde la alimentación, la comunidad y la alegría de vivir se combinan de forma natural.
Ingredientes clave en la cocina de Okinawa
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Batata morada
Históricamente el alimento básico que reemplazó al arroz durante generaciones. Rica en antioxidantes y fibra, fortalece el sistema inmunológico y promueve la buena salud. -
Goya (melón amargo)
Una verdura conocida por su característico sabor amargo y sus propiedades antiinflamatorias y reguladoras del azúcar en sangre. -
Tofu y productos de soja
Ricos en proteínas vegetales e isoflavonas beneficiosas para el corazón, que ayudan a mantener un corazón fuerte y una salud estable. -
Algas marinas (hijiki, kombu)
Ricas en yodo y minerales esenciales que apoyan la vitalidad del cuerpo.
Tradiciones de bebidas
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Té verde y té de jazmín (Sanpincha)
Consumidos a diario, ricos en antioxidantes que protegen contra enfermedades y fomentan la calma y el equilibrio. -
Awamori
El licor tradicional de Okinawa a base de arroz, disfrutado con moderación durante celebraciones junto a amigos y familiares.
Filosofía de vida y comunidad
Los habitantes de Okinawa siguen el principio de Hara Hachi Bu, que consiste en comer hasta estar al 80 % de la capacidad, una forma natural de evitar el exceso y favorecer la salud a largo plazo.
Además de la alimentación, otros factores juegan un papel crucial:
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Ikigai – un propósito en la vida
En Okinawa, es habitual que cada persona tenga un ikigai claro, una motivación o propósito personal que da sentido y dirección a su vida diaria. -
Comunidad y risa
Fuertes redes sociales, grupos de amigos (moai) y una cultura que valora la risa y la ligereza ayudan a reducir el estrés y a generar energía positiva. -
Movimiento diario y actividad natural
En lugar de realizar ejercicios intensivos, los okinawenses se mueven de forma natural mediante actividades cotidianas como la jardinería, las caminatas y las tareas del hogar.
En Corkframes nos inspiramos en el enfoque holístico de la vida en Okinawa, donde la buena comida, las comunidades fuertes y la alegría de vivir forman juntos la base para una vida larga y feliz.