El jamón de Navidad glaseado con mostaza es un clásico sueco, pero si buscas probar algo nuevo esta temporada festiva, hay muchas opciones deliciosas y festivas para explorar. Un glaseado hecho con glögg (vino caliente sueco) y naranja aporta dulzura, acidez y especias cálidas, y lleva el sabor de tu jamón cocido al siguiente nivel.
Aquí tienes una receta sencilla pero impresionante que llenará tu cocina con el aroma de la Navidad y añadirá un toque sabroso a la mesa tradicional de las fiestas.
Receta: Jamón Glaseado con Glögg y Naranja
Ingredientes:
1 jamón de Navidad cocido (aprox. 3-4 kg / 6-9 lbs)
100 ml de glögg (vino caliente sueco; se recomienda una variedad fuerte)
Ralladura de 1 naranja orgánica
1 cucharada de zumo de naranja fresco
1 cucharada de sirope claro (o miel suave)
1 yema de huevo
2 dl de pan rallado (el panko da un extra de crujido)
Instrucciones:
Prepara el jamón:
Retira la red y la piel del jamón cocido. Deja una capa fina de grasa para el sabor y la humedad.Prepara el glaseado:
Bate el glögg, la ralladura de naranja, el zumo de naranja, el sirope y la yema de huevo en un bol.Pincela el jamón:
Coloca el jamón en una fuente apta para horno. Pincela generosamente el glaseado por toda la parte superior.Añade el pan rallado:
Espolvorea el pan rallado sobre la superficie glaseada, presionándolo suavemente para que se adhiera.Hornea el glaseado:
Precalienta tu horno a 225 °C (437 °F). Hornea el jamón en el centro del horno durante unos 15-20 minutos, hasta que el glaseado esté dorado y crujiente.Déjalo reposar:
Retira el jamón del horno y déjalo reposar durante al menos 10 minutos antes de cortarlo. Esto ayuda a que los jugos se asienten y facilita cortes más limpios.
Consejos para un glaseado alternativo exitoso
El equilibrio es clave: Un buen glaseado necesita dulzura (glögg o sirope), acidez (zumo de naranja o vinagre) y grasa (yema de huevo) para crear profundidad de sabor y textura.
Dale un toque picante: Añade canela molida, jengibre o incluso un toque de chile para un giro moderno.
Factor crujiente: Utiliza panko o mezcla el pan rallado con frutos secos o semillas picadas para un acabado extra crujiente.
Realza el sabor: Espolvorea una pizca de sal marina en escamas por encima antes de hornear; realza tanto la dulzura como la profundidad.
Otras ideas de glaseados para probar:
Miel y romero
Mermelada de higos y vinagre balsámico
Puré de manzana y mostaza Dijon suave
Naranja y jengibre fresco
Glögg y anís estrellado



























